MOTO MORINI NOS RECUERDA CON LA X-CAPE QUE EN LOS AÑOS 60 Y 70 YA SE HACÍA ‘MOTO-TURISMO’

Es curioso que para hablar de un nuevo modelo se haga referencia a los viajes en moto que ya se hacían hace más de 60 años. Así nos lo cuenta Moto Morini para hablarnos de su modelo X-Cape, una moto trail preparada para afrontar los viajes de la manera más confortable y segura para sus dos ocupantes. Moto Morini ya comercializaba motos en los primeros años del moto-turismo, lo que le ha servido para saber cómo debe ser una moto dispuesta a ‘devorar kilómetros’.

NOTA DE PRENSA DE LA MARCA:

Moto Morini acompaña a los aficionados a la moto desde hace más de medio siglo y su historia siempre ha estado ligada a la competición y la velocidad. Sin embargo, la firma italiana tiene un ADN de libertad y aventura inconfundible. El máximo exponente dentro de su catálogo es la X-Cape, que recoge las principales características y prestaciones necesarias en una montura pensada para largos viajes y rutas y que es, en definitiva, una muestra de la evolución de las motos y de la forma de viajar de los motoristas. ¿Sabes cómo lo hacían en los años 60 y qué ha aprendido Moto Morini de ello?

Viajar en moto permite unir diferentes pasiones en una única experiencia. Los motoristas que se adentran en el mundo del turismo sobre dos ruedas disfrutan de la aventura en carretera y fuera de ella y conocen lugares inolvidables, todo ello bañado con la adrenalina y la sensación de libertad que sienten sobre sus monturas. No fue hasta finales de los 80 cuando se popularizó el moto-turismo, pero lo cierto es que 20 años antes ya eran muchos los que hacían suya la filosofía de “carretera y manta” y abrían caminos, nunca mejor dicho, para los que vendrían más tarde. Desde entonces, la evolución de las motos ha sido exponencial, pero para comprenderlo tenemos que hacer un viaje en el tiempo. Hagámoslo de la mano de la Moto Morini X-Cape.

Aquellos que se aventuraron en los años 60 y 70 a recorrer las carreteras de España y de Europa lo hicieron sobremotos de baja cilindrada y dudosa comodidad. Motos que, generalmente, estaban pensadas y diseñadas para el uso diario, como ocurría con la primera 125 de Moto Morini, que no tardó en evolucionar hacia un perfil de carreras. Las monturas estaban prácticamente desnudas, lo que hacía que los motoristas se enfrentaran de una manera más directa a las inclemencias del tiempo, además de reducir la aerodinámica. Ahora, como muestra la X-Cape, las motos de corte trail presentan carenados ideados para mejorar este último aspecto y, por supuesto, para ofrecer una experiencia de pilotaje cómoda y agradable.

Además de su clara implicación en la velocidad, Moto Morini también apostó en sus inicios por las motos para todo uso.

Cuando se habla de un viaje en moto, hay que tener en cuenta que los motoristas pasan muchas horas sobre su montura, con pequeños descansos para reponer fuerzas. Trayectos de cientos de kilómetros en los que son ellos y sus máquinas contra el mundo, y esto, en los años 60, era más real que nunca. Hoy en día, el confort de piloto y acompañante está más que garantizado gracias a asientos amplios y a una altura cómoda con respecto al suelo y al manillar, algo que choca directamente con los estrechos y sencillos asientos de sus antepasadas.

La discreta figura de las motos de la época, además de no ejercer en ningún momento de escudo para el piloto, complicaba notablemente el aspecto del equipaje. Ahora, estas motos se venden de serie con maletas laterales y top case, ofreciendo una capacidad de carga inmejorable. Sin embargo, hace medio siglo, los aventureros que viajaban en moto tenían que conformarse con bolsas blandas, muchas veces aseguradas con cinchas y con mucha imaginación. Y con mapas doblados y guardados de formas imposibles, que poco tienen que ver con los avanzados sistemas de navegación integrados y las apps de las que disponen motos actuales como la X-Cape, que permiten a los usuarios saber qué camino deben tomar, dónde se encuentran y, por ejemplo, cuál es el estado del tráfico en la ruta.

Todo ello sin contar con las ayudas electrónicas de las que los motoristas pueden disfrutar ahora, que resultan en una conducción mucho más sencilla e intuitiva, así como más segura. El aumento de la popularidad del moto-turismo ha provocado que los fabricantes apuesten por una evolución y un desarrollo de monturas específicas para esta disciplina y tecnologías ideadas para mejorar la experiencia final del motorista, que ahora puede centrarse mucho más en disfrutar de su pasión con la seguridad de tenerlo todo bajo control.

  ¿Cómo es la Moto Morini X-Cape?  

Esta trail de media cilindradaágil y accesible, equipa un motor bicilíndrico en línea de 649 cc, capaz de entregar 60 CV a 8.250 rpm y con un par máximo de 54 Nm a 7.000 rpm. Con una respuesta lineal y fácil de gestionar por el usuario, ofrece una experiencia de pilotaje ágil y cómoda, también gracias a su manillar regulable en tres posiciones y a su amplio asiento, con una altura de 845 mm (existe una opción a 820 mm). Además, el pasajero goza de un espacio bastante amplio y de unos cómodos asideros, para agarrarse en marcha.

En la parte ciclo, destacan los frenos Brembo, con doble disco delantero de 298 mm de diámetro, con pinzas axiales de dos pistones, y disco trasero de 255 mm, la horquilla Marzocchi regulable con barras de 50 mm, el ABS 9.1 de Bosch, desconectable detrás, y el monoamortiguador, también regulable, Kayaba. La Moto Morini X-Cape monta rueda delantera de 19’’ y trasera de 17’’, con neumáticos Pirelli Scorpion Rally STR de serie, perfectos tanto para rodar por carretera como fuera del asfalto.

Dispone de una imponente pantalla TFT de 7 pulgadas, una de las más grandes del mercado, que ofrece de manera clara toda la información necesaria para el usuario, y está equipada con un sistema de navegación integrado (a través de la aplicación MotoFun App), condoble toma USB, que permite conectar varios dispositivos e incluso cargarlos, y conexión Bluetooth.

La Moto Morini X-Cape puede adquirirse en cualquiera de los concesionarios de la marca en España desde 7.290 euros.

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